Si decide irse, hágalo bien

Un convenio entre los gobiernos de Colombia y España promueve la migración laboral de nacionales en condiciones de legalidad. Se tramitan acuerdos similares con otros países.

El éxodo de nacionales hacia países de diferentes latitudes obedece a diferentes factores. La violencia y la falta de oportunidades en Colombia responden a sólo dos de los criterios observados. Pero ¿qué porcentaje de las personas que migran encuentran condiciones dignas de vida y trabajo?

Un gran número de ellos a diario ven vulnerados sus derechos fundamentales y están sometidos a prácticas laborales que carecen de remuneración digna y a la ausencia de garantías sociales que los protejan ante los riesgos propios de la actividad que ejecutan o que mitiguen la calamidad de residir en una cultura ajena a la propia. El sueño se convierte en pesadilla.

Pero el fenómeno no es excluyente: es una tendencia social observable en países de América Latina, Asia y África. De igual forma, se ha transformado en un calamidad difícil de afrontar para las naciones destino. Estados Unidos y algunos países del bloque europeo sufren la coyuntura de los efectos secundarios de este tipo de flujos migratorios.

Para enfrentar esta problemática el gobierno español y el colombiano han suscrito una iniciativa que contribuye a canalizar el desplazamiento de personas en un marco de legalidad que favorece el desarrollo de los trabajadores y garantiza su protección. El modelo que hoy opera con éxito es un ejemplo que empieza a imitarse. Así lo señaló Julia Gutiérrez de Piñeres, directora Nacional de Empleo, en desarrollo de la Jornada de análisis jurídico-social Migraciones Laborales*.

Los resultados son alentadores y avalan la operación del convenio que viene operando desde 2001. Alrededor de 1.720 oportunidades en 30 oficios y 17 áreas ocupacionales así lo demuestran. El Servicio Nacional de Aprendizaje (Sena) ya ha empezado a explorar la viabilidad de firmar otros acuerdos similares al suscrito con España pero con gobiernos como el canadiense.

Qué es el convenio

El convenio es un acuerdo intergubernamental celebrado en España y Colombia que viene operando desde el año 2001. Su principal finalidad es garantizar que los trabajadores provenientes de Colombia tengan un marco legal de protección que favorezca la aplicación de derechos reconocidos por la ley internacional. De esta forma, evita que empleadores españoles los sometan a condiciones laborales indignas y desfavorables.

A partir de ese escenario de regulación de la actividad laboral, promover el respeto de los derechos humanos de los colombianos residentes en el país ibérico y promover planes de prevención de migraciones clandestinas que estimulen la explotación de extranjeros en condiciones de ilegalidad.

El mecanismo de trabajo opera a través de ofertas de empleo de los empresarios españoles interesados en surtir sus compañías con fuerza laboral colombiana. Los representantes de las compañías elaboran las requisiciones que incluyen tanto el perfil de los cargos como las condiciones de trabajo y de vida que ofrecerán al individuo.

Las vacantes disponibles son reportadas por el gobierno español a la embajada en Colombia para que el Sena, a través de su red de empleo encuentre los mejores perfiles disponibles y reglamente las condiciones de viaje de la persona escogida. Pese a que la elección es realizada por los empresarios, la entidad de formación coordina aspectos puntuales como la documentación del emigrante.

Los dos gobiernos se encargan de verificar el cumplimiento de las condiciones laborales y sociales de los trabajadores. De acuerdo con Gutiérrez de Piñeres, el convenio tiene estipulado el regreso de las personas después de un año de labores en España y que el costo de los pasajes sea cubierto por el postulante.

El acuerdo está coordinado por entidades estatales de los dos países suscritos. De un lado, por los ministerios de Relaciones Exteriores y Protección Social así como por el Departamento Administrativo de Seguridad (DAS). Del otro, por las carteras de Asuntos Exteriores, Interior y Trabajo españolas. Sin embargo, la coordinación en Colombia está a cargo del Sena y la Dirección Nacional de Empleo.

Esa responsabilidad encuentra soporte legal en el Decreto 489 de 2004 que delega al Sena, entre otras funciones, la de dirigir el Servicio Público de Empleo para favorecer el cruce entre oferta y demanda del mercado laboral. Asimismo, la operación de convenios nacionales e internacionales de migraciones que permitan la inserción laboral de los trabajadores colombianos.

Procedimientos del convenio

En la aplicación del acuerdo se distinguen un esquema general de selección que parte con la requisición de los empresarios españoles, y otro interno, ejecutado por el Sena para encontrar los candidatos más apropiados.

Reporte de las vacantes:los empresarios españoles informan al ministerio de Trabajo de ese país las vacantes con las que cuentan. En ellas se describe el perfil técnico deseado.

Consulta de mano de obra disponible:el gobierno español determina dentro de su base de datos local si no hay mano de obra calificada para los empleos disponibles entre los residentes de ese país.

Envío de la requisición a la embajada en Colombia:si no se encuentran interesados en las vacantes dentro del territorio español, se envían las ofertas para que sean surtidas a partir de la gestión del Sena.

La entidad colombiana abre la convocatoria a los interesados y realiza una preselección de acuerdo con el perfil del cargo.

Selección de las personas:la embajada y los empresarios españoles determinan quienes de los candidatos preseleccionados por el Sena les interesan y efectúan los trámites del contrato. Una copia del mismo es enviado al ministerio de Relaciones Exteriores colombiano.

Seguimiento, control y evaluación:la cancillería colombiana aplica planes de seguimiento de las personas emigrantes y evalúa la operación del convenio durante su estadía y al regreso.

Cómo preselecciona el Sena

Una vez el Sena recibe la vacante de las embajada de España en Colombia, esta es remitida a la Dirección Nacional de Empleo para que la ingrese en la base de datos de la entidad y se elaboran los términos de participación para los interesados.

Con todos los requisitos especificados, la entidad abre la convocatoria a través de la página web. Las personas que desean participar del proceso deben ingresar su hoja de vida en el Servicio Público de empleo. A partir de esa acción, el Sena revisa las base de datos de la oferta disponible para el cargo.

La siguiente etapa consiste en la revisión de los requisitos con las hojas de vida de los candidatos para determinar si cumplen con el perfil. A través de publicación en la página web de la entidad se informa que postulantes cumplen con todas las condiciones exigidas por los empresarios españoles.

Taller de inducción.El grupo que cumple con el perfil deseado es invitado a un taller de inducción en el que se informan las condiciones del convenio y las siguientes etapas del proceso.

Conformación de elegibles.El Sena determina los grupos de candidatos elegibles para que participen del proceso de selección ejecutado por la embajada de España y los empresarios contratantes.

Selección de candidatos. Las dos entidades responsables aplican entrevistas a las personas elegibles y en algunos casos, pruebas técnicas según el cargo. Después de una valoración de los resultados se da el proceso de escogencia.

Publicación de resultados.El Sena comunica los resultados obtenidos en las pruebas y la lista de las personas seleccionadas.

Una vez informados los trabajadores elegidos, la última etapa comprende un completo programa de capacitación y formación del Sena en el que se les explican las normas, leyes, costumbres, condiciones de permanencia, salarios, garantías y deberes, entre otros aspectos relevantes sobre la vida y el trabajo en España.

Los pasos siguientes

Una vez escogidas las personas que van a hacer parte del convenio, la Embajada de España en Colombia y el empleador contratante se encargan de efectuar los trámites logísticos necesarios. Estos incluyen la recopilación de la documentación para el trámite de las visas, una valoración médica, la firma de contrato y el desplazamiento hacia la península ibérica.

De otra parte, las autoridades colombianas en coordinación con las españolas son las encargadas de ejecutar el seguimiento en la ejecución del contrato. La verificación del cumplimiento del acuerdo se hace a través de la Dirección General de Asuntos Consulares y Comunidades Colombianas.

Sin embargo, las acciones de seguimiento no se extinguen allí: el convenio contempla seis aspectos adicionales sobre los cuales están trabajando los ministerios del Interior de España y el de Relaciones Exteriores de Colombia. Estos son:

- Programas de ayuda para el retorno voluntario de los ciudadanos colombianos al país de origen. Para facilitar el retorno de los trabajadores que no se adaptaron al medio.

Medidas para la reinserción laboral del trabajador migrante.Para que después de su experiencia en España se les facilite la consecución de un empleo en Colombia. Los contratos, inicialmente, son a un año.

- Desarrollo de proyectos con fondos propios y provenientes de organismos internacionales de capacitación. Para promover la creación de empresa en Colombia.

- Capacitación profesional del migrante y reconocimiento de la experiencia profesional obtenida en España.

- Creación de empresas binacionales que favorezcan la asociación entre empresarios y trabajadores de los dos países.

- Implementación de programas de coodesarrollo.

Resultados positivos

Al tenor de la información estadística recopilada por los responsables del acuerdo, las perspectivas son positivas. De acuerdo con Gutiérrez de Piñeres, pese a que España tiene suscritos convenios similares con Ecuador y algunos países centroamericanos, la capacidad del trabajador colombiano, sumado a la orientación hacia el servicio, han fomentado el aumento de las requisiciones año tras año.

Durante los dos primeros meses del año en curso 107 colombianos han tenido la oportunidad de viajar. El número es destacable si se advierte que en el 2004 el total llegó a 500.

Las áreas donde se han presentado mayores vacantes son las destinadas a ocupaciones culinarias y la actividad agrícola con un porcentaje del 32% y el 30% respectivamente. Sin embargo, también son frecuentes requisiciones para áreas ocupacionales tales como transporte, artes gráficas, peluquería y construcción.

Las edades promedio de las solicitudes oscilan entre los treinta y los 45 años, según el cargo. De igual forma, en la descripción de los perfiles de experiencia exigidos en cada materia oscilan entre uno y tres años. En esta condición el sector más exigente es el de artes gráficas (3).

La ejecución del acuerdo representa un ventana de oportunidades para estimular los flujos migratorios legales de colombianos. Los beneficios son visibles. En primer término, el trabajador que emigra, porque garantiza condiciones dignas de trabajo y protección social. Asimismo, recibe la oportunidad de adquirir experiencia profesional durante un año con una remuneración muy superior a la que se ofrece en el mercado laboral colombiano (en promedio nueve mil euros al año).

Para Colombia porque abre un espacio de oportunidades laborales para que el Sena cumpla con unos de sus objetivos: favorecer la empleabilidad. De igual forma, porque garantiza el retorno de capital humano mejor capacitado en un término de un año. Para España, es la oportunidad de surtir a sus industrias de fuerza laboral normalmente escasa para suplir algunos cargos y para controlar la migración de ilegales.